viernes, 11 de mayo de 2007

Desencuentro

Dos cosas no quiso decirle: una la calló, la otra la dijo entre dientes.
-¿Qué dijiste? preguntó ella.
-Nada, respondió él mientras esquivaba su mirada.
Luego ya no se hablaron; ella le tomó sus manos y él no se opuso pero pidió la cuenta.

Caminaron hasta su casa, la de ella; en la puerta hubo besos que recordaban besos mucho más antiguos.
-¿Me vas a llamar?, preguntó ella.
-Mañana, dijo él.
Y mañana, que fue hoy pero se volvería ayer él llamo pero sólo atendió un contestador que decía: sí que entendí lo que dijiste.

1 comentario:

Rino Cerontillo dijo...

Hey loco, me gusta mucho como escribis... seguire entrando de vez en cuando y leyendo de a poco. Felicidades... me gusto mucho este.